La primera que encabeza el raking es Cataluña con una suma de 18 figuras impositivas, más que ninguna otra región española, además de tres impuestos declarados como inconstitucionales. El pasado año 2017 creó cuatro nuevos impuestos en el famoso “año del procés”. Según los datos ofrecidos por el Consejo General de Economistas, es la comunidad que más castiga a las rentas bajas y medias, que son gran parte de los contribuyentes de la comunidad y del conjunto del territorio estatal.

A comparación de los habitantes de la capital, los ciudadanos de Cataluña tienen que pagar hasta 300€ más si los ingresos son de 30.000€ al año y tienen 5.100€ de impuestos.

En el estudio se observa que en Extremadura y la Comunidad Valenciana son las regiones que más presionan a las rentas medias-altas y altas, respectivamente. En el caso extremeño, por ejemplo un contribuyente soltero sin hijos y menos de 65 años que declare 45.000 euros deberá abonar 9.822 euros en impuestos, 500 euros más que en la Comunidad de Madrid. Y en la región valenciana, un ciudadano que ingrese 110.000 euros tendrá que hacer frente al pago de 38.663 euros por los 36.375 euros que exige la comunidad de la capital de España.

Impuesto de Patrimonio

La comunidad más exigente es Aragón en la que un contribuyente con un patrimonio total de 800.000 euros deberá abonar 1.164 euros en impuestos. Extremadura gana la medalla de plata en patrimonios “medios” porque en patrimonios que superen el millón es el más exigente, ya que si el patrimonio es de 4 millones, los impuestos exigidos rozan aquí los 60.000 euros.

Las mejor paradas son la Comunidad de Madrid, La Rioja, Castilla y León, Castilla – La Mancha o el Pricipado de Asturias que rondan un nivel bajo-medio.

Fuente: Consejo General de Economistas/ elmundo.es